Seguros: protección para altos ejecutivos

Mala praxis empresarial

Frente al aumento de las demandas contra gerentes y directores por errores de gestión, se hace necesario contar con una cobertura D&O

Lejos quedaron los tiempos en que un error de gestión o una mala decisión se castigaban con un simple despido. Hoy el camino elegido es el judicial, terreno donde cada vez es más común encontrar a directores y gerentes defendiéndose de las demandas presentadas por la sociedad, los accionistas o los terceros damnificados (como clientes o empleados).
Igual que los médicos, que sufren cada vez más el acoso judicial de los pacientes insatisfechos con los resultados de una operación o un tratamiento, los ejecutivos también pueden ser acusados de mala praxis empresarial. Según el artículo 59 de la ley de sociedades, "los administradores societarios deben obrar con lealtad y con la diligencia de un buen hombre de negocios. Los que faltaren a sus obligaciones son responsables, ilimitada y solidariamente, por los daños y perjuicios que resultaren de su acción u omisión". Es decir, deben responder por sus faltas con su patrimonio personal.
Administración fraudulenta, divulgación errónea de información, competencia desleal, parcialidad en cuestiones de despidos, trabajo en negro, incumplimiento de deberes de administración o mala decisión de inversión (muy común en la Argentina posdefault) son algunas de las demandas habituales de las que suelen ser blanco los hombres y las mujeres que llevan las riendas de las empresas que operan en el país.
Tendencia en alza
Si bien el nivel de litigiosidad aquí todavía es bajo, muchos de los que ocupan cargos de decisión comenzaron a inquietarse. Y hoy son pocos los que acceden a sentarse en el sillón del director o gerente sin negociar antes un seguro D&O (directors and officers, por sus siglas en inglés), una póliza de responsabilidad civil diseñada especialmente para protegerlos por los daños sufridos por otros como consecuencia de las decisiones que toman en el ejercicio de sus funciones.
"En la Argentina, la tendencia comienza a ser preocupante porque se pretende cada vez más responsabilizar a los directores y gerentes de las decisiones que han tomado", dice Gregorio Sánchez, gerente del área de Finpro de Marsh Argentina, asesora de seguros especializada en riesgos corporativos y financieros que gestionó la primera póliza D&O en el país para YPF, en 1994.
También en el estudio de abogados Marval, O´ Farrell & Mairal confirman el aumento en el número de demandas presentadas contra gerentes y directores. "Si bien todavía no son muy comunes ni se puede hablar de un estallido, hubo un incremento en los últimos años, sobre todo después de la crisis, que hace necesario que muchos ejecutivos se protejan con este tipo de pólizas", comenta Pablo Cereijido, abogado especialista en seguros.
Pero, a pesar de que las demandas -algunas millonarias- aumentaron, todavía son pocas las condenas a directores y gerentes. "La Justicia no suele fallar contra los ejecutivos. Pero aunque no exista condena ya hay un daño porque todo juicio acarrea gastos. Y lo que precisamente tiene de interesante esta póliza es que cubre los costos legales", explica Cereijido.
Aceleradores
Una de las causas que aceleró la contratación de los D&O fue una resolución de la Inspección General de Justicia (IGJ), que desde el año último obliga a todos los directores a constituir una garantía frente a la sociedad mediante un depósito de 10.000 pesos, una póliza D&O o un seguro de caución, que es mucho más económico, pero no protege el patrimonio del ejecutivo, sino a la sociedad.
Otra de las causas que disparó la contratación de este tipo de pólizas es la entrada en vigor del decreto 677/01, que impone la designación de un comité de auditoría compuesto, como mínimo, por dos directores independientes para todas las empresas que cotizan en la Bolsa. Estas figuras asumen tareas de supervisión y opinión que las exponen frente a terceros y por eso están exigiendo seguros de D&O.
"Se trata de un decreto que impulsa los principios de buen gobierno corporativo. Implica mayor transparencia y comunicación hacia los socios externos con tenencias minoritarias, que tienen mayor conocimiento sobre sus derechos y se muestran activos en los reclamos hacia los directores, gerentes y síndicos", explica Florencia Gallino, suscriptor senior de la aseguradora internacional Chubb.
En cifras, el crecimiento se tradujo en un 70% más de pólizas contratadas por medio de Marsh durante el año último. En total, en el mercado argentino, hay alrededor de 85 pólizas vigentes por primas cercanas a los 13 millones de dólares que protegen a unos 500 ejecutivos. Las sumas aseguradas van desde el millón hasta los 50 millones de la divisa norteamericana.
Aunque en un principio el perfil de empresas que contrataban estos seguros era el de las multinacionales, hoy es más variado. "Ya no es más la empresa de gran tamaño la única que compra este seguro -cuenta Sánchez-. Si bien las primeras compañías fueron las que tenían acciones o deuda cotizando en los mercados internacionales, de a poco se sumaron firmas totalmente nacionales que lo consideran una forma eficiente de proteger a su management."
En Chubb también confirman la diversificación de las compañías que contratan este tipo de seguros. "En la actualidad, esta póliza es comprada por pymes y hasta por entidades sin fines de lucro", comenta Gallino.
Es que cuando se trata de tomar decisiones trascendentes no hay empresas grandes, pequeñas o medianas. Sin importar el tamaño de la compañía ni su ámbito de operación, todos los directores y gerentes están expuestos a posibles demandas. Y la única manera de sentarse en el sillón tranquilo, con la mente despejada y los sentidos despiertos, es tener un buen respaldo. Tanto en la silla como en la vida.
Laura Reina - del diario "La Nación" - Domingo 3 de abril de 2005. 
Panorama mundial
Aunque en la Argentina es una incipiente tendencia, los juicios contra gerentes y directores son moneda corriente en Estados Unidos, la cuna de los seguros D&O. "El desarrollo de la cultura del reclamo derivó en un incremento de demandas, que hizo necesaria la adopción de medidas por parte de los ejecutivos para proteger sus patrimonios privados", señala Sánchez.
En Europa, en cambio, existe un desarrollo desparejo. Si bien en el Reino Unido ya hay muchas pólizas D&O, en el continente recién están comenzando. "Existe una gran concientización acerca de la necesidad de contar con este seguro a partir de grandes reclamos que hubo en Alemania y Francia", concluye Sánchez.